A la hora de realizar un cuadro, existen numerosos métodos para lograr esa inspiración que hará que lleves acabo toda una obra maestra digna de admirar. Conseguir dicha inspiración depende mucho del artista. Algunos se concentran escuchando su música preferida, otros prefieren disfrutar de un espléndido paisaje y otros sencillamente de forma inesperada les llega la musa que tanto anhelaban. Lo cierto es que cuando de paisajes se trata, nada más hermoso que el mar. No solo se trata de las diferentes vistas que se pueden aprovechar, también se trata de la brisa que ofrece, su peculiar aroma, la arena… Todo lo que lo conforma lo convierte en un mundo único que merece ser conservado, retratado y compartido. Por tal motivo no es de extrañar que muchos sean quienes enfoquen su arte en crear cuadros marinos. Bien sea por parte de un artista plástico o un artista fotográfico.
Pero ¿La fotografía es un arte? Claro que lo es. Y como no ser considerado un arte aquello que sencillamente puede alegrar la vista de muchas personas. Además lograr capturar una fotografía artística no es cosa fácil. En la actualidad existen muchos amateur que dicen ser fotógrafos. Pero lo cierto es que pocos logran esos resultados profesionales que realmente cautivan a cualquiera. Este tipo de cuadros se refiere a lienzos donde son impresos alguna imagen digitalizada. La cual para considerarse como una obra de arte debe contar con un buen trabajo de composición, perspectiva, luces y sombras de tal forma que logren cautivar a cualquiera que lo vea, de tal forma que no pasa desapercibido. Definitivamente este tipo de resultados merece la pena ser llamados de otra forma o categorizarlos como algo más que una simple fotografía. Por tal motivo muchos son quienes toman fotos, pero se dedican a la fotografía artística.